Manual de mujeres en el cual se contienen muchas y diversas recetas muy buenas (Anónimo)

Cómo es en mí una costumbre, cada vez que termino alguna novela que me ha gustado mucho, me quedo varios días como "en trance", identificada con la historia que casi "viví", su lugar, la época, y por supuesto con los personajes.

No podía pasarme algo diferente, cuando leí este verano la colección de novelas románticas de Florencia Bonelli. 

Me sentí Laura Escalante, y me hice baños de aceite de almendras dulces y vinagrillo para el pelo; o Melody, y busqué sentir el aroma de la esencia de frangipani y de vetiver; también, Blanca Montes, con sus recetas y hierbas medicinales. Pero fue conocer a Rafaela, y sentirme ella, preparando pebeteros con esencias, el pelador para el vello ( 1810 y ya se depilaban!!), ungüentos para labios partidos, lejias y jabones de flores ó sus recetas para aguas olorosas... todas, extraidas del "Manual de mugeres en el cual se contienen muchas y diversas recetas muy buenas". 

Me pregunté si era una licencia de la autora, o sería cierto que existe un libro con tremendo título.

Así fue, como raudamente me senté ante la máquina diabólica, y tipeé en el buscador mi pregunta. 

Hete aquí... que SI, señores!! Éste manual existe!!! 

Es un libro anónimo publicado en castellano en el siglo XVI, en dónde se describen de manera fascinante y casi graciosa para nuestra época algunas recetas de cosméticos y remedios caseros, para las damas y para toda la familia.

Tanto me gustó, que busqué traducir algunos términos del castellano antiguo al actual, para ver si esas recetas eran viables en nuestra época.

Y...tanto leer, buscar, mirar, por puro placer nomás, que llegué como sin querer, a unos blogs de jabones artesanales que me enamoraron!!!!

Por qué yo no puedo hacer todo esto, si me encanta?? me pregunté...

Pregunta va y duda viene, la cosa es que me animé a probar, y me puse a hacer jabones, oleatos y aguas de flores

En eso estoy... aprendiendo. Un delirio; un hobbie; puro disfrute; intentando emular a Rafaela, la de las flores.